Apoyo al sector rural y educativo del país

*El Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER), organismo integrante de la Secretaría de Educación Pública (SEP), otorgó la acreditación.

**La Dirección General de Atención al Sector Social y Productivo operará esta entidad, la cual desarrollará un sistema de certificación de competencias laborales para que las instituciones y organizaciones relacionadas con el sector rural y educativo del país cuenten con personal calificado, preparado y formado.

La Universidad de Colima logró la acreditación como entidad de evaluación y certificación de competencias laborales por parte del Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER), organismo integrante de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Dicho proceso se realizó en el marco del Sistema Nacional de Competencias, un instrumento del Gobierno Federal que contribuye a la competitividad económica, al desarrollo educativo y al progreso social de México, así como a la profesionalización de las funciones individuales con base en el fortalecimiento de las habilidades, destrezas y competencias de su personal.

La Dirección General de Atención al Sector Social y Productivo operará esta entidad, “la cual desarrollará un sistema de certificación de competencias laborales para que las instituciones y organizaciones relacionadas con el sector rural y educativo del país cuenten con personal calificado, preparado y formado en su función individual, y que esto se traduzca en procesos de mejora competitiva”, manifestó José Luis Fonseca Vázquez, titular de dicha dependencia universitaria.

La entidad certificadora debe cumplir un proceso de seis pasos antes de operar como tal. Actualmente se lleva a cabo el de transferencia de conocimiento, que consiste en la inducción al personal de la entidad sobre los métodos de evaluación. Posteriormente, se realiza el de acreditación de estándares de competencia, que será la oferta que responda a las necesidades de los sectores de la región, luego el registro de la acreditación de los Centros de Evaluación y Evaluadores Internos.

El cuarto paso en este proceso son las evaluaciones cruzadas, que consisten en la certificación del personal que participará en los procesos de evaluación de los distintos estándares que ofrecerá la entidad. El quinto es el establecimiento de los procesos de Evaluación de Competencias y Verificación Interna de los solicitantes, y por último está la Emisión de Certificados de Competencia a solicitantes que cumplieron satisfactoriamente el proceso de evaluación. Además, deberá realizar promoción del Sistema Nacional de Competencias a través de la instalación, puesta en marcha y operación del comité de gestión por competencias.

Mireya Elizarrarás López, jefa del Departamento de Normatividad de Certificación del CONOCER, explicó que “la acreditación como Entidad de Certificación y Evaluación permitirá a la Universidad de Colima capacitar, evaluar y/o certificar las competencias laborales de las personas con base en estándares de competencia inscritos en el Registro Nacional de Estándares de Competencia, así como para acreditar, previa autorización del CONOCER, centros de evaluación y/o evaluadores independientes en uno o varios estándares de competencia en un periodo determinado”.

Además, “un certificado de competencia laboral reconoce el saber hacer de una persona independientemente de la forma en que se haya adquirido ese conocimiento; esto deriva en mejores oportunidades de empleo”, puntualizó.

En el evento de arranque de las actividades, Luis Bueno Sánchez, coordinador general de Extensión, manifestó el interés del rector de la Universidad de Colima, José Eduardo Hernández Nava, por generar opciones para formalizar las competencias de quienes participan en los procesos productivos y de servicios en la entidad.

“El objetivo es involucrar a los distintos sectores productivos para que conozcan los beneficios que obtienen quienes se certifican en un estándar de competencia y adopten esto como un requisito y valor agregado en sus procesos de producción y prestación de servicios, todo basado en las buenas prácticas”, concluyó Bueno Sánchez.