Organización, constante preparación, talento científico y práctico, respeto por la vida, ética y amplia calidad humana son las cualidades que debe poseer una enfermera, según lo explicó en conferencia la docente de la Facultad de Enfermería, Cinthya Paola Martínez Orozco.

“Quien pueda contribuir a que el hombre obtenga bienestar, se realizará y se hará más humano; ustedes se están formando en una profesión que requiere esa parte siempre presente. A pesar del exceso de trabajo y estrés, deben tener la capacidad de voltear a ver al paciente y prestarle atención”.

De esta manera habló la catedrática universitaria, Cinthya Paola Martínez Orozco, en su conferencia “Humanismo en Enfermería”, que dictó en el marco de la XXIII Semana de Enfermería y Desarrollo Humano que organiza la facultad del área de la Universidad de Colima.

Resaltó que la enfermera de hoy debe ser capaz de fortalecer al paciente ante el dolor, ser organizada, estar constante preparación, tener talento científico y práctico, respeto por la vida, ética y amplia calidad humana.

“A cuántas personas conocemos que saben muchísimo, que saben de memoria un libro, pero en el momento en que están con su paciente hay que calificar su desempeño humano. Tenemos que combinar todas estas partes porque en nuestra profesión vamos estar en contacto con muchas personas”, dijo.

Paola Martínez puntualizó que todos y cada uno de los procedimientos de la práctica de la enfermería generan algún tipo de dolor en el paciente, por lo que deben prepararlo para causarle el menor dolor posible, “no sólo con el aviso del dolor que están por padecer sino también con un acercamiento amable al paciente, sonreírle, mostrar interés por él, y realizar la aplicación puntual de analgesia, entre otras medidas”.

Manifestó que en una encuesta hospitalaria a los pacientes, éstos pidieron que las enfermeras o enfermeros sonrían más, que no lleguen regañando, que no los juzguen, que sean discretas con su persona, que no les griten, que no se burlen de ellos y que los atiendan con puntualidad. En este sentido, la experimentada enfermera les pidió a los estudiantes de este plantel que desde ahora inicien una formación integral y el día que se enfrenten a un hospital, “no se les olvide que las personas que atienden necesitan de ellos”.

Concluyó diciendo que el reír provoca que el celebro produzca beta-endorfinas, morfinas naturales del organismo que relajan y combaten la depresión, tranquilizan, disminuyen el dolor y estimulan el sistema inmunológico, “por ello hay que sonreírle al paciente”.