“La falta de apoyo y de políticas públicas en materia de educación, investigación y ciencia, ha ocasionado un gran rezago en nuestro país en estos temas”, dijo en entrevista Medardo Serna González, presidente del Consejo Mexicano de Estudios de Posgrado (COMEPO).

De visita en la Universidad de Colima, comentó que actualmente México cuenta con cerca de 55 mil doctores, cuando se requieren 120 mil para atender un desarrollo de acuerdo con nuestra economía, “por esta razón COMEPO sigue alzando la voz y ayudando a mejorar este tipo de situaciones”, señaló el también coordinador de estudios de posgrado de la Universidad Michoacana.

Explicó que desde los noventas se ha tenido un incremento en los posgrados, pero el rezago tecnológico en México aún continúa, “y esto tiene que ver con la falta de políticas para apoyar el desarrollo integral de México con base en el conocimiento. Hay que tener presente que en el posgrado es donde se forman los investigadores totalmente y que en materia de investigadores todavía tenemos rezagos impresionantes”.

Serna González dijo que hay estudios que muestran que cuando se invierte en la formación de doctores y se abren las puertas en el sector gubernamental, los países progresan. “Necesitamos invertir más en la ciencia, la investigación y la innovación. En México tenemos más de cuarenta años que no pasamos del 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) destinado a la ciencia. No se le ha apostado decididamente a la educación superior, a la investigación, y aquí el posgrado juega también un papel muy importante”.

Añadió que su propuesta desde la COMEPO es crear un proceso gradual en el que se requiere de la participación de todos, “porque no es un asunto del gobierno ni de las universidades, es un asunto de todos. A nosotros nos toca hablar del posgrado, de la importancia que tiene; planteamos soluciones a estas problemáticas y obviamente que hay que articular el posgrado con el sector productivo y laboral”.

Finalmente, mencionó que la Universidad de Colima es un referente entre las universidades públicas estatales de nuestro país “por su organización, planeación, y por la calidad educativa que ofrece en materia de posgrados”.