Un semillero de colimenses incorporó la perspectiva y análisis de género en su vida, profesión y academia. Se trata de los y las egresadas del diplomado en Comunicación con Perspectiva de Género que impartió el Centro Universitario de Estudios de Género (CUEG) durante los últimos meses.

“Es notable esta apropiación por la seguridad con la que hablan sobre el tema y por los análisis hechos en sus trabajos finales”, concluyó la integrante del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM), Nadia Marlene Rosas, invitada para valorar la etapa final del diplomado en el Panel de Reflexión, previo a la clausura.

Marlene Rosas, quien se asume como feminista y además reflexiona sobre las emociones y las situaciones que envuelven a los seres humanos, destacó cómo este enfoque crea un espacio y una oportunidad para decidir.

Basada en su propia experiencia, señaló que sin este reconocimiento de los derechos de igualdad de las mujeres, difícilmente tendríamos una posición para decidir ser madre o no serlo, trabajar o no trabajar. Para ella, anunciarse como feminista es la oportunidad que le otorga la vida para decidir.

Durante el panel seis alumnos, con perfiles diversos, expusieron sus reflexiones, experiencias de vida, aplicaciones en sus centros de trabajo, planes y cuestionamientos que demostraron la adopción de esta perspectiva.

Entre las exposiciones, Karina Ortiz, de manera enfática y segura, asumió lo aprendido de tal manera que, dijo, su verbo favorito a partir del diplomado es visibilizar. Por su parte, Víctor Villanueva asumió como un compromiso personal y social, más que llevarse un aprendizaje, todo lo que sus maestras y compañeras dijeron. Reflexionando sobre su vida personal, dijo ser ahora feminista confeso “y así [también] salgo del clóset”.

La joven Jeanette Lazcano compartió el decálogo para identificar el sexismo en la publicidad a través de imágenes para vender productos donde exponen a la mujer de manera denigrante, identificadas con labores tradicionalmente femeninas, incapaces de controlar emociones, obligadas a la perfección, temerosas a los animales y a otras situaciones.

Y en los medios de comunicación, Mayra Contreras, del Instituto Colimense de la Mujer, dio a conocer cómo, a través del programa Entre Evas y manzanas, buscan incidir en la disminución de la violencia.

Celia Cervantes, coordinadora del diplomado, dio a conocer que los perfiles de los egresados fueron licenciados en Comunicación, Periodismo, Letras, Relaciones Públicas, Ciencias Políticas, Psicología y Derecho. Todos ellos están insertos en sus trabajos en áreas de comunicación social, periodismo o relaciones públicas.

A partir de ahora la perspectiva de género la conocen y están sensitivos a ella personal de la Secretaria de la Juventud, Instituto Colimense para la Discapacidad, Instituto Colimense de las Mujeres, Instituto Colimense de Radio y Televisión, Dirección de Radio, Dirección de Televisión de la Universidad de Colima y Procuraduría de Justicia del Estado.