Diccionario, - República del congo (brazzaville) El país fue reconocido en 1879 por el francés Pierre-Paul Savorgnan y, en 1886, declarado colonia francesa. Posteriormente junto con otros países vecinos, formó parte del Africa Ecuatorial Francesa con el nombre de Congo Medio. En 1956 obtuvo la autonomía interna y en 1958 se constituyó en República autonóma dentro de la Comunidad francesa. Tras una efímera unión con las Repúblicas de Chad, Centroafricana y Gabón, en 1960 se proclamó República independiente. En 1970 adoptó el nombre de República Popular del Congo. Historia reciente: Tras la crisis política de 1977 y la proclamación de Yhombi-Opango como jefe del estado, aunque el verdadero hombre fuerte era el vicepresidente primero del Comité militar ministro de Defensa y coordinador general del P.C.T., Denis Sassou-Nguesso, secundado por Louis Sylvain Goma, vicepresidente segundo primer ministro y ministro de Planificación, el Comité militar reforzó su posición al desarticular un intento de golpe de estado (en agosto de 1978), que, por otra parte, sirvió de pretexto para restringir las actividades públicas de diversas confesiones religiosas, acusadas de participar en presuntas actividades contrarrevolucionarias, polémico decreto que no se aplicó a las confesiones mayoritarias (católica, islámica). Con posterioridad fue cesado y acusado de traición el presidente Yhombi-Opango (en febrero de 1979) lo que permitió un reajuste en la cúspide política; se suprimió el Comité Militar y se nombró al coronel Sassou-Nguesso presidente de la república y al coronel Sylvain jefe del gobierno (marzo de 1979). De acuerdo con las tesis del congreso del P.C.T., Sylvain organizó unas elecciones generales y un referéndum constitucional (8 de julio de 1979), en los que participó el 90 % del electorado, que seleccionó, entre los candidatos propuestos por el P.C.I, a los miembros de la Asamblea Nacional Popular y a las autoridades locales, a la vez que refrendaba una constitución socializante. Con este respaldo, el presidente Sassou-Nguesso concedió una amnistía a los implicados en los intentos de golpe de 1977 y 1978, redujo la pena al ex-presidente Yhombi-opango y prosiguió los planes de desarrollo del país, basados en sus recursos petroleros y en el equilibrio en la colaboración exterior, recibida tanto de Francia y China como de Cuba y la U.R.S. S. Esta tesis pragmática se acentuó con posterioridad (visita de Juan Pablo II, mayo de 1980, homenaje al colonizador francés, fundador de la capital, P. de Brazza, octubre de 1980) y se puso de manifiesto con ocasión de la firma de un acuerdo económico y político con la U.R.S.S. (mayo de 1981), al negarse el gobierno congoleño a conceder una segunda base naval. Desde mediados de la década de los ochenta el régimen de Sassou-Nguesso hubo de hacer frente a un creciente deterioro de la situación económica (introducción de medidas de austeridad, en noviembre 1985) y a la persistencia de las trivalidades tribales, que a menudo desembocaron en enfrentamientos armados (en septiembre de 1987 una rebelión debió sofocarse con ayuda de tropas francesas). En 1989 Denis Sassou-Nguesso fue reelegido secretario general del Partido Congoleño del Trabajo, el único partido político del Congo, por 5 años. En 1990, el comité central del partido en el poder decidió instaurar el multipartidismo en el país y abandonar su ideología marxista-leninista. En junio de 1991 la República del Congo abandonó el calificativo de popular, con ocasión de la entrada en vigor de una nueva Constitución y tras haberse formado un nuevo Gobierno e implantarse un nuevo sistema económico de libre mercado, hechos todos que vinieron a materializar el triunfo de la que fue llamada la revolución tranquila. En marzo de 1992 se aprobó en referéndum por abrumadora mayoría la vuelta a la democracia multipartidista. Después de los brotes de violencia que causaron centenares de muertos el Congo se instaló en una situación de tensión persistente. El orden público se le escapó de las manos al Estado. Los intentos de recogida de armas, así como los proyectos de enrolamiento de los milicianos en el ejército o la policía, se revelaron inaplicables. El Congo experimentó en 1995 un apaciguamiento que ha permitido una estabilización de la vida política. El equilibrio político encontrado al salir de la crisis de 1994 desembocó en una solución precaria. El gobierno de Jacques Yhombi-Opango, que sólo acogía a partidos del entorno presidencial, se abrió el 23 de enero de 1995 a una coalición adversa:la Unión para la Renovación Democrática (URD), confiando el ministerio del Interior al coronel Bikinkita, líder del Movimiento Congoleño para la Democracia y el Desarrollo Integral (MCDDI). Este último no ha roto su alianza con la coalición de las Fuerzas Democráticas Unidas (FDU), cuya organización principal es el antiguo partido único, el Partido Congoleño del Trabajo (PCT), liderado por el ex-presidente Denis Sasú Ngueso. Los sindicatos convocaron huelgas escasamente seguidas debido a divisiones políticas. En los sucesos de 1993-1994 (en enfrentamientos entre las milicias de los partidos murieron varios centenares de personas) se han alzado protestas para denunciar la desigualdad de tratamiento según las preferencias políticasEnciclopedia, México, Colima, Revista Electronica Fumarola, Noticias LeeColima, Lee Colima

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El país fue reconocido en 1879 por el francés Pierre-Paul Savorgnan y, en 1886, declarado colonia francesa. Posteriormente junto con otros países vecinos, formó parte del Africa Ecuatorial Francesa con el nombre de Congo Medio. En 1956 obtuvo la autonomía interna y en 1958 se constituyó en República autonóma dentro de la Comunidad francesa. Tras una efímera unión con las Repúblicas de Chad, Centroafricana y Gabón, en 1960 se proclamó República independiente. En 1970 adoptó el nombre de República Popular del Congo. Historia reciente: Tras la crisis política de 1977 y la proclamación de Yhombi-Opango como jefe del estado, aunque el verdadero hombre fuerte era el vicepresidente primero del Comité militar ministro de Defensa y coordinador general del P.C.T., Denis Sassou-Nguesso, secundado por Louis Sylvain Goma, vicepresidente segundo primer ministro y ministro de Planificación, el Comité militar reforzó su posición al desarticular un intento de golpe de estado (en agosto de 1978), que, por otra parte, sirvió de pretexto para restringir las actividades públicas de diversas confesiones religiosas, acusadas de participar en presuntas actividades contrarrevolucionarias, polémico decreto que no se aplicó a las confesiones mayoritarias (católica, islámica). Con posterioridad fue cesado y acusado de traición el presidente Yhombi-Opango (en febrero de 1979) lo que permitió un reajuste en la cúspide política; se suprimió el Comité Militar y se nombró al coronel Sassou-Nguesso presidente de la república y al coronel Sylvain jefe del gobierno (marzo de 1979). De acuerdo con las tesis del congreso del P.C.T., Sylvain organizó unas elecciones generales y un referéndum constitucional (8 de julio de 1979), en los que participó el 90 % del electorado, que seleccionó, entre los candidatos propuestos por el P.C.I, a los miembros de la Asamblea Nacional Popular y a las autoridades locales, a la vez que refrendaba una constitución socializante. Con este respaldo, el presidente Sassou-Nguesso concedió una amnistía a los implicados en los intentos de golpe de 1977 y 1978, redujo la pena al ex-presidente Yhombi-opango y prosiguió los planes de desarrollo del país, basados en sus recursos petroleros y en el equilibrio en la colaboración exterior, recibida tanto de Francia y China como de Cuba y la U.R.S. S. Esta tesis pragmática se acentuó con posterioridad (visita de Juan Pablo II, mayo de 1980, homenaje al colonizador francés, fundador de la capital, P. de Brazza, octubre de 1980) y se puso de manifiesto con ocasión de la firma de un acuerdo económico y político con la U.R.S.S. (mayo de 1981), al negarse el gobierno congoleño a conceder una segunda base naval. Desde mediados de la década de los ochenta el régimen de Sassou-Nguesso hubo de hacer frente a un creciente deterioro de la situación económica (introducción de medidas de austeridad, en noviembre 1985) y a la persistencia de las trivalidades tribales, que a menudo desembocaron en enfrentamientos armados (en septiembre de 1987 una rebelión debió sofocarse con ayuda de tropas francesas). En 1989 Denis Sassou-Nguesso fue reelegido secretario general del Partido Congoleño del Trabajo, el único partido político del Congo, por 5 años. En 1990, el comité central del partido en el poder decidió instaurar el multipartidismo en el país y abandonar su ideología marxista-leninista. En junio de 1991 la República del Congo abandonó el calificativo de popular, con ocasión de la entrada en vigor de una nueva Constitución y tras haberse formado un nuevo Gobierno e implantarse un nuevo sistema económico de libre mercado, hechos todos que vinieron a materializar el triunfo de la que fue llamada la revolución tranquila. En marzo de 1992 se aprobó en referéndum por abrumadora mayoría la vuelta a la democracia multipartidista. Después de los brotes de violencia que causaron centenares de muertos el Congo se instaló en una situación de tensión persistente. El orden público se le escapó de las manos al Estado. Los intentos de recogida de armas, así como los proyectos de enrolamiento de los milicianos en el ejército o la policía, se revelaron inaplicables. El Congo experimentó en 1995 un apaciguamiento que ha permitido una estabilización de la vida política. El equilibrio político encontrado al salir de la crisis de 1994 desembocó en una solución precaria. El gobierno de Jacques Yhombi-Opango, que sólo acogía a partidos del entorno presidencial, se abrió el 23 de enero de 1995 a una coalición adversa:la Unión para la Renovación Democrática (URD), confiando el ministerio del Interior al coronel Bikinkita, líder del Movimiento Congoleño para la Democracia y el Desarrollo Integral (MCDDI). Este último no ha roto su alianza con la coalición de las Fuerzas Democráticas Unidas (FDU), cuya organización principal es el antiguo partido único, el Partido Congoleño del Trabajo (PCT), liderado por el ex-presidente Denis Sasú Ngueso. Los sindicatos convocaron huelgas escasamente seguidas debido a divisiones políticas. En los sucesos de 1993-1994 (en enfrentamientos entre las milicias de los partidos murieron varios centenares de personas) se han alzado protestas para denunciar la desigualdad de tratamiento según las preferencias políticas

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