*La educación superior mexicana requiere elevar su cobertura del 32 al 40 por ciento, destinar el 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para apoyar la educación superior y el uno por ciento para tecnología y desarrollo, este último consignado en la Ley de Ciencia y Tecnología: Rector

En el marco de la consulta correspondiente al estado de Colima para conformar el Plan Nacional de Desarrollo, el rector de la Universidad de Colima, José Eduardo Hernández Nava, propuso cambios jurídicos para dar sustentabilidad financiera a las políticas públicas de educación superior pública del Pacto por México.

En este sentido, Hernández Nava destacó en su mensaje que éste es el momento de hacer grandes cambios para conferir la mayor prioridad, dentro de la agenda nacional, a la educación, el conocimiento y la formación de ciudadanos comprometido con los valores democráticos.

Estos cambios jurídicos, dijo el rector, fueron propuestos dentro de la ANUIES y consisten en adicionar dos párrafos al artículo 25 de la Ley Federal de Educación y modificar el nombre actual por el de “Ley para la Coordinación y el Financiamiento de la Educación Superior”.

La primera adición sería: “A las instituciones públicas de educación superior se deberá destinar un gasto público de, al menos, el equivalente al 1.5 por ciento del PIB”. El gasto público, añadió, lo conformarían la suma del gasto federal más el que realizan las entidades federativas, los municipios y los compromisos de convenios entre estos órdenes de gobierno.

También se propuso reformar los artículos 12, 21, 24 y se adicionen los artículos 25 y 26 de la Ley para la Coordinación de la Educación Superior. “Estas reformas deberán especificar que la educación pública se financiará mediante la asignación de recursos públicos federales, estableciendo, en su caso, programas plurianuales a fin de garantizar el crecimiento de la matrícula y el desarrollo de las instituciones de educación públicas”.

El artículo 21 deberá reformarse y decir: “Los municipios, dentro de sus posibilidades presupuestales, apoyarán el financiamiento de la educación superior pública”. Mientras que al artículo 24 quedaría así: “Para los fines de esta ley, los recursos que la federación otorgue a las instituciones públicas de educación superior serán ordinarios y específicos. Y para necesidades extraordinarias las instituciones podrán solicitar recursos adicionales”.

Y la propuesta de adición al artículo 26 deberá indicar: “Para el fortalecimiento de las funciones de docencia, investigación y difusión de la cultura, la federación apoyará a las instituciones públicas de educación superior con recursos destinados al financiamiento de fondos específicos, que podrán contar con una programación plurianual”.

Informó que entre las organizaciones académicas que coincidieron en presentar las modificaciones y adiciones se encuentran, además de la ANUIES, el Movimiento Nacional Tecnológico Universitario, la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios y la Asociación Nacional de Padres de Familia, junto con académicos, intelectuales y artistas.

Todos ellas coinciden en que la educación superior mexicana requiere elevar su cobertura del 32 al 40 por ciento, destinar el 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para apoyar la educación superior y el uno por ciento para tecnología y desarrollo, este último consignado en la Ley de Ciencia y Tecnología.

Hernández Nava se dijo confiado en que las propuestas de política pública del sector académico contribuyan a la construcción de una visión compartida sobre el tema y también al Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018.

El Foro Colima, celebrado el centro de convenciones Allegra, convocó a secretarios de gobierno, senadores, embajadores y servidores del orden público y estatal.

Profesores investigadores y funcionarios de la Universidad de Colima presentaron propuestas concretas para transformar la educación superior del estado de Colima. Entre ellos, Lourdes Galeana de la O, Ana Luz Quintanilla, Teresa Valdez Betancourt, José Manuel Orozco Plascencia, Óscar Javier Solorio, Salvador Ventura del Toro y Fernando Rivas Mira.