* A través de la promoción de hábitos saludables
* Alimentación, menos alcohol y tabaco reducen riesgo de cáncer Una alimentación adecuada, ejercicio físico y reducir el consumo de alcohol y de tabaco son hábitos de vida saludable que previenen y disminuyen el riesgo de padecer cáncer, de ahí la importancia de consumir agua, frutas y verduras, ingerir menos grasas de origen animal y evitar el sobrepeso y la obesidad. La necesidad de realizar cambios en la forma de vivir para que la vida sea cada vez más saludable fue destacada por el Sector Salud en el inicio de las “X Jornadas de Enfermería Oncológica”, en donde se capacita y actualiza a enfermeras y enfermeros de instituciones públicas y de clínicas particulares para mejorar el cuidado del paciente oncológico. Los factores de riesgo relacionados con los estilos de vida son alimentación rica en carbohidratos y baja en fibra; dieta rica en grasas, tanto animales como ácidos grasos; obesidad, sedentarismo y consumo excesivo de alcohol; además, los factores externos que contribuyen a la mortalidad por esta enfermedad se deben a que las personas no se realizan oportunamente la detección, misma que resulta fundamental para evitar la aparición de lesiones precursoras del cáncer. Como el cáncer es una enfermedad con mayor respuesta al tratamiento cuando se detecta en etapas iniciales, el momento en que se descubre marca la diferencia entre el pronóstico de sobrevida, la respuesta al tratamiento y el costo económico, emocional y familiar. Durante esta capacitación se abordan temas como manejo de cistostáticos, efectos inmediatos, braquiterapia, cuidados de ostomías y de catéteres y riesgo y exposición de la radiación, así como Tanatología, complicaciones de la quimioterapia, relación de ayuda, nutrición en el paciente oncológico y aspectos de calidad. |