Los médicos han recibido un don y mandato para sanar a sus pacientes, en ellos esta el acompañarlos a rectificar lo que ha venido deteriorando su salud, en ellos cabe la palabra de aliento, en ellos existe manto de protección de líderes; su trabajo es Santo cuando no quebrantan la fe y esperanza de sus pacientes, cunado reconocen que es Dios quien les da el poder para hacer. Mucha es la honra y por ende la responsabilidad cuando se es médico. Son ustedes benditos cuando su labor la ejercen en alabanza a Dios, trabajando de la mano con Él por la salud del cuerpo, el alma y el espíritu de las personas que en ustedes confían. Gracias a los médicos por su entrega, labor y misión. |