Una generación de 398 estudiantes egresaron del Bachillerato Técnico No.1 de la Universidad de Colima, en las áreas de técnico analista programador, técnico en contabilidad y bachillerato general.

Este grupo de jóvenes, quienes conforman la generación 2009-2012, tuvo como padrino al profesor Ángel Ramírez López, catedrático del plantel.

El secretario académico de la casa de estudios, Juan Carlos Yáñez Velazco, en representación del rector Miguel Ángel Aguayo López, resaltó que es urgente construir un país mejor, un país más justo, más democrático, próspero, pero sobre todo, “un país más seguro, el cual se construye en las mentes y en los corazones de las personas, especialmente de las más jóvenes”.

Agregó que la mejor vía que se tiene para construir la paz es la educación, una educación que pueda servir a distintos propósitos, que sirva para preparar al joven para tener un empleo, conocer una ciencia, entrar al próximo nivel educativo y, principalmente, una buena educación para formar mejores personas: “las sociedades necesitan sin duda buenos profesionistas, buenos ingenieros, médicos, veterinarios, profesores y buenos ciudadanos”.

El director del bachillerato, Marcial Aviña Iglesias, comentó que cada uno de los jóvenes que egresan, en su transitar académico, demostraron que estudiar no era una obligación sino una oportunidad de enrolarse en el mundo del conocimiento, “pues estaban conscientes de que cada aprendizaje adquirido era un complemento de ellos mismos”.

Indicó que tales aptitudes son producto de la inspiración que lograron fomentar los docentes a lo largo de su formación académica, motivando “el escurridizo deseo de aprender, profesores cuyas habilidades cada día construían sobre el viejo camino de la enseñanza nuevos aprendizajes para estos jóvenes”.

Finalmente, como un merecido reconocimiento a la práctica docente de todos los profesores que les impartieron clases, buscaron como pretexto hacer del maestro Ángel Ramírez López, “el gigante Atlas que desde hoy, mañana y siempre cargará sobre sus hombros el mundo de la generación 2009-2012”.

En nombre de los estudiantes habló el joven José Luis Castillo Sosa, quien dijo que hace tres años que entraron al bachillerato buscaban sueños, ilusiones, esperanzas; ahora tres años después cumplieron una etapa de su vida, y sólo les queda reconocer la noble labor de sus profesores, ya que fueron guías, tutores de los que hasta ahora han aprendido.

Por su parte, Ángel Ramírez López, en entrevista dijo sentirse orgulloso de que sus alumnos lo eligieran para ser el padrino de la generación, ya que para él significa “lo que cultivamos en el salón, ellos son nuestros hijos y hoy cosechamos lo que sembramos”.